Capítulo 314
Capítulo 314
Capitulo 314
Silvia nunca imaginé que se encontraria con lan tan pronto.
En un escenario bastante inusual.
Capitulo 314
Al dia siguiente, Silvia fue a tomar café con una amiga.
La cafeteria estaba en el primer piso de un hotel de cinco estrellas, un lugar con un ambiente agradable.
Frente a ella, estaba su amigo de la infancia, Nicolas Villasefior, quien le pregunt6 con preocupacidn: “Ya estas bien? Por qué te preocupas tanto por un hombre tan despreciable como para tomar tres pastillas para dormir por él?”
La voz de Silvia era suave como la de un gatito “No sabia que él habia estado con mi cufiada, es un hombre despreciable. Cuando pienso en cémo engafio a mi cufiada durante afios, me dan ganas de matarlo.
Ella resoplo “Afortunadamente, mi cufiada no cayo en su trampa*. Nicolas no pudo evitar reir jQué inocente era esta chica!
Mientras las dos chicas conversaban, no se dieron cuenta de que a dos mesas de distancia se encontraban un grupo de hombres y mujeres muy respetables. Entre ellos estaban lan y el secretario Gonzalo, acompafiados de dos 0 tres asistentes.
Fue el secretario Gonzalo quien los vio primero.
Bajo la voz y dijo: “Sr. Molina, es la sefiorita de la familia Bécquer*.
lan tomé su cafe tranquilamente.
Ya se habia dado cuenta de la presencia de las chicas y habia escuchado su conversacion... Vaya, qué inocente era ella! lan estaba muy ocupado y no le faltaban mujeres a su alrededor.
No tenia intencién de interactuar con la sefiorita de la familia Bécquer, asi que se levantd para irse, sus asistentes también se levantaron con una pizca de ansiedad profesional...
*Silvial”
Un hombre de aspecto deslumbrante aparecié de repente y tomé suavemente la mufieca de Silvia
Era Raul
Después de que se revelé su aventura, Silvia dejo de responder a sus llamadas y se neg6 a escuchar sus explicaciones. Ella habia tomado las pastillas.
Y no fue hasta ahora que pudo verla...
Silvia se solto de su agarre, su rostro delicado se arrugo ligeramente, “Me has hecho dafio!”
Raul queria reconciliarse.
Aunque su amante era obediente y dulce, solo era una distracci6n. Silvia, con su orgulloso linaje y su inocencia, era la esposa ideal para el
Habia bajado su guardia, “Hablemos seriamente!”
Nicolas no pudo aguantar mas, ;Qué mas hay que hablar, Raul? Admites que tenias una amante, y ahora que todo ha salido a la luz, piensas que Silvia te permitira seguir con tus tonterias!”
En la elegante cafeteria. Nicolas levant6 el dedo medio!
lan estaba a punto de irse, pero decidid quedarse, encontrando la situacién bastante interesante. Le dijo al secretano Gonzalo. “Mira cOmo son los jovenes de hoy!”
El secretario Gonzalo siempre sabia como complacer a lan
Fingio estar molesto, “Solo tienes cuarenta y tantos afios, jaun eres joven!”
lan sonnio
Justo entonces, un altercado verbal se convirtid en un enfrentamiento fisico
Silvia estaba bien, pero su bolso se habia caido el suelo y sus pertenencias se habian esparcido por todas partea Siete u ocho pintalabios,
Vanus lindos llaveros, especialmente uno en forma de cordero que era muy adorable Y lo mas importante, un biberén muy pequefio
El ambiente se volvid incomodo de repente
Capitulo 314
lan estaba bastante sorprendido.
Sabia que Silvia era un par de afios mayor que Clara, pero gpor qué... llevaba un biberén y un mufieco de peluche?
~Acaso aun no habia dejado de ser amamantada?
Por lo tanto, el secretario Gonzalo vio a lan, que rara vez sonreia, mostrar una sonrisa ligera. No se podia decir que estuviera muy contento, pero
era evidente que estaba satisfecho
Los ojos de Silvia estaban llenos de lagrimas.
Se sintid muy avergonzada y mordio su labio: “Raul, rompamos nuestro compromiso!” Raul estaba a punto de hablar...
lan intervino “Recoge sus cosas!”
No se podia permitir que cualquiera viera el biberdn de la pequefia nifia.
El secretario Gonzalo asintid con una sonrisa, luego procedié a recoger las cosas con mucha paciencia, incluso se tom6 la molestia de cerrar la cremallera y colocar todo en su lugar original.
Silvia miraba a lan con asombro.
Su amiga Nicolas también estaba asombrada, gquién era este hombre? Parecia muy impresionante, y tenia un carisma que lo distinguia de los
demas
Silvia, de piel tan blanca y delicada, emanaba una presi6on impresionante. Después de un largo silencio, Silvia apenas pudo murmurar: “jlan!”
lan estaba sentado entre la multitud...Ccontent © exclusive by Nô/vel(D)ra/ma.Org.
No tenia intencién de ponerse de pie, pero cuando ella lo llamo lan, de alguna manera se levanto, se acerco a ella y ella inclind la cabeza hacia arriba, sus ojos brillantes llenos de lagrimas, mirandolo con ansias.
Como un cachorrito sin duerio!
lan tuvo el impulso de acariciar la cabeza del cachorro, pero resisti saltando de alegria hoy?”
. Simplemente pregunto con indiferencia: “;Has estado
Silvia apenas pudo hacer un ruido con su garganta. Siguid mirandolo fijamente.
El viejo amigo Nicolas estaba al borde del desmayo. lan era guapo, pero, Silvia, gpodrias contener un poco tu admiracion y mostrar algo de compostura?
Pero a lan no le importé
Hacia mucho tiempo que no veia una mirada tan pura, como la de un congjito. Ella era igual
Era alta, pero parecia suave donde deberia serlo
En medio de su mirada compartida, Ratil no pudo resistir mas. Sentia la presion del hombre frente a el. Le preguntd a Silvia: “Quién es el? Tu nuevo amor? Silvia no tomaste pastillas para suicidarte por mi?*.
Habia un toque de resentimiento masculino en sus palabras
Raul era orgulloso En su relacion con Silvia, siempre habia tenido el control total. Sabia que Silvia lo amaba profundamente y siempre le obedecia, por lo que nunca se preocupé cuando se descubrid que tenia una amante
Despues de romper con la amante, solo necesitaba reconquistar a Silvia
Nunca imagin6 que Silvia miraria a otra persona con los mismos ojos de admiracion Si admiracion!
lan no presto atencién a Raul En sus ojos, Rati no era diferente de Rafael Linares Levanto la mano con calma y dijo con indiferencia “Por favor, caballero, retirese Raul se quedo aténito
De repente, ocho guardias corpulentos de negro aparecieron, todos con auriculares inalambricos, luciendo extremadamente profesionales El lider de ellos dijo con cortesia pero firmeza “Sr Molina le pide que se retire”
Sr Molina
Raul no estaba seguro de quien era realmente fan, pero al mirarlo, le resultaba familiar Era practico. Se arreglo la chaqueta y le dijo a Silvia “Hablemos otro dia”
Silvia se aparto
Capitulo
Nunca volveria a hablar con él. gDe qué serviria? Ya habia decidido seguir adelante. Pero las esquinas de sus ojos se enrojecieron.
Despues de todo, ella lo habia amado....
lan miré la esquina enrojecida de los ojos de la joven. Sonrié y se preparé para irse
Su manga fue agarrada
Silvia lo miré con fervor, su voz era suave como la de un gatito “Tan, tengo algo que decirte, gme permites invitarte a cenar?” lan fruncié el cefio ligeramente
Realmente no tenia tiempo, tenia que encontrarse con varias personas mas tarde.
Pero tal vez porque habia estado solo durante mucho tiempo, no pudo rechazar a esta chica encantadora y suave que le suplicaba. Le dijo “;Vamos!”
Luego salié de la cafeteria
Una docena de seguidores y guardaespaldas le seguian en gran numero, y aunque vestia ropas casuales y parecia tranquilo e indiferente, incluso su piel era blanca y sus rasgos eran elegantes, se podia decir de un vistazo que era un jefe.
Silvia recogié su bolso y lo siguid.
Nicolas, su viejo amigo, la detuvo: “Estas local Como te atreves a meterte con este tipo de hombre?”
Silvia lamio sus labios: “Es el tio de mi cufiada! Es el Sr. Molina de Medellin, el que sale en las noticias... lan“. Dicho esto, salié corriendo.
Nicolas se quedo atonito,
El Sr. Molina de Medellin, uno de los personajes mas destacados de Laureles, controlaba la tecnologia mas avanzada del pais, el jefe de los jefes {Ese tipo de persona habia descendido al mundo comun!